SAN PÍO V. GRAN BÓVEDA ESCARLATA

Serie PAISAJES
Óleo sobre tabla
98'5 x 79'5 cm
Año 2004
Colección particular. Valencia 

En este caso, aunque ciertamente lo es de casi todas las pinturas de esta colección, el cielo es el protagonista principal dándole el peso y la dimensión convenientes. 
Es una interpretación de los días en que soplan hasta estas costas ciertos vientos africanos cargados de materia y que oscurecen y sofocan de rojo el aire de Valencia.

5 comentarios:

  1. Hola Luis eres un pintorazo, un maestro de la forma y el color, y eso que estas empezando.... un beso, Isabel

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  2. Me gusta ver la serie del Pío V, porque todos sus cuadros aportan un matiz diferente al mismo paisaje. Y cuando leo tus comentarios comprendo que nada es casual, que han surgido de una profunda contemplación a través de diferentes momentos, dejando que la luz modele en tu interior día a día sentimientos y sensaciones, creando espacios mentales nuevos y haciéndote más y más grande... y todo eso lo recibimos quienes contigo nos sumergimos en esa magia creativa.

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  3. Gracias,Inma. Me emociona este epistolar abierto. Quizás conviene aclarar que las posibles reflexiones a que me llego sean permitir que las pinturas lleguen al lugar para el que nacieron. Ser campana o caja de guitarra. Que ellas elijan a uno u otro artista es porque son bien listas y saben cómo quieren figurar. Que las cosas se tuerzan no señalan sino miopías o sorderas. Quizás, incluso, vanidad o soberbia, de las que no estoy libre. Gracias,también,por leerme.

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  4. Hoy mi reflexión es para mi comentario de ayer. Al leerlo de nuevo debo de puntualizar algo: las obras hablan por sí mismas, no necesitan comentarios, ellas no, nosotros, los que las contemplamos, sí. Lo explicas muy bien en tu contestación: miopías y sorderas, no solo para el que crea sino especialmente para el que recibe la obra. Contemplar una obra requiere una actitud interior de silencio, de dejar hacer en uno mismo; no de salir al encuentro sino de dejarse llenar, completar y permitir nuevas resonancias sin controlar nada, sin hacer nada, sin criticar ni juzgar nada. También es un acto de generosidad del que uno sale enriquecido.

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  5. Estoy de acuerdo y, sin embargo, me da no sé qué esa actitud que se opone a la cerrilidad manifiesta y universal. En mi caso, siento que no miro determinados asuntos "artísticos" porque de antemano no los acepto así. Y es curioso, si me dejo llevar por ese estar del que hablas, algo pasa con ellos que se aceptan suavemente y toman una dimensión nueva

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